
Lo más significativo de la pintura y de todas las formas de arte es que detrás de ellas hay personas que piensan, sienten y que quieren servirse del arte para decir algo. Hay quien hace de la expresión su razón de vida. Un buen ejemplo de ello son los artistas. No solo plasman sus ideas, además pueda darles voz a otros, haciendo de vehículo a algo que ha sido llamado universal.
La pintura es tan sólo un lenguaje entre tantos más. En ella se usan color, trazo, línea, forma, mancha y las características de los materiales en lugar de las palabras. Este es el lenguaje del artista que se identifica con las imágenes que pueden lograrse con la pintura
Las técnicas de pintura deben su desarrollo a la búsqueda, e incluso la lucha, de algunos artistas del pasado por mejorar su obra

¿Listo para descubrir algunas de las técnicas de la pintura más populares?
Se llama técnica a la forma con la que se lleva a cabo una pintura. Las técnicas, por lo tanto, son diferentes entre sí y cada una cuenta con sus propios tipos de materiales. Además, cada una sigue procedimientos diferentes para poder ser llevada a cabo. En general, hay técnicas más complejas que otras. También hay que tener en cuenta que no todas se pueden emplear sobre los mismos soportes. Vamos a dar un repaso por los tipos de técnicas de pintura más conocidas, y a términos asociados a la pintura que debes conocer.
Técnica de pintura en acrílico
Cuando hablamos de las diferentes técnicas de pintura es normal observar que muchas tienen puntos en común. Por ejemplo, en el caso de la pintura acrílica se trata de una técnica en la que el pigmento, lo que da el color, es similar a las técnicas de pintura al óleo o la acuarela. Pero se diferencia en el tipo de aglutinante, que es lo que se emplea para mantener unidos los pigmentos de color. Este tipo de pintura utiliza un aglutinante acrílico, de ahí su nombre.
Esta técnica es soluble al agua y proporciona un acabado denso y cubriente. Cuando se seca una capa se puede pintar otra encima y también se pueden aplicar capas gruesas con la tranquilidad de que no se resquebrajará la pintura. Además, el resultado es más duradero y admite muchos soportes. Con la pintura acrílica podrás pintar sobre papel, lienzo, vidrio y madera, entre otros.
Técnica del óleo
Es una de las técnicas de pintura más antiguas que se conocen. En este caso, los pigmentos se aglutinan con sustancias aceitosas lo que les da una textura bastante espesa. Además, se trata de un tipo de técnica en el que hay que utilizar diluyente en diferentes proporciones para los colores. Por si fuera poco, según el tipo de diluyente la pintura puede tardar varios días en secar. Muy utilizada para realizar retratos, que dependiendo del tamaño varían los precios de retratos.
Todo esto implica adquirir conocimientos y practicar mucho para conseguir aplicar la técnica bien. Al final, se hace casi mecánico saber cuánto diluyente usar y cómo superponer las capas de pintura. El óleo es quizás uno de los tipos de pintura donde los cuadros mejor se conservan, ya que el aceite que se mezcla con los diluyen crea una película protectora sobre los colores y protege la pintura.

Técnica de acuarela
La acuarela es una técnica bastante común soluble al agua, pero con pigmentos más transparentes. Eso quiere decir que son menos densos. Es una técnica donde se pinta por capas de más claro más a oscuro. Es decir, se trata de una técnica de adición. Primero se pintan las zonas más claras y luego, mediante capas, se van creando zonas de color cada vez más oscuras. Por eso, al principio, puede ser complicado entender la técnica. Esta técnica a pesar de ser bastante común, no suele ser mu utilizada para realizar réplicas de cuadros famosos.
El papel del agua es fundamental en la acuarela. Gracias al agua y los pigmentos tan diluidos se pueden emplear distintas técnicas con las que consiguen distintos efectos muy atractivos visualmente como manchas o degradados de color. Es una técnica que permite crear con mucha soltura y las obras tienen un acabado característico de espontaneidad, ligereza y movimiento.
Técnicas de húmedo sobre húmedo
La técnica de húmedo sobre húmedo es un método de pintura que se utiliza principalmente en acuarela y óleo, caracterizado por la aplicación de pintura sobre una superficie previamente humedecida. Esta técnica permite que los colores se mezclen y difuminen de manera natural, creando transiciones suaves y efectos visuales dinámicos.

Los artistas que emplean esta técnica suelen trabajar con un papel o lienzo húmedo, lo que facilita la fusión de los pigmentos y la creación de gradaciones de color. Al aplicar un nuevo color sobre la superficie húmeda, se obtienen resultados etéreos y fluidos, ideales para representar cielos, paisajes y elementos naturales donde se busca una sensación de movimiento y luz.
Técnicas del pastel
El pastel es una técnica en seco en la que no se emplean disolventes ni pinceles. Por lo general, es fácil de manipular y mezclar. Lo que se utilizan son barras, similares a tizas, de pigmento de color y goma de tragacanto. Es una técnica enfocada, principalmente, en el color y las texturas. Se emplea para hacer dibujos detallados donde predominan las combinaciones armoniosas de colores y la representación de luces y sombras.
Del mismo modo que sucede con la acuarela, lo ideal es utilizar la pintura pastel sobre un papel especial para esta técnica. En la técnica al pastel, una vez que se finalizan las pinturas se tienen que sellar con un fijador que las protege y ayuda a que los colores permanezcan adheridos al papel por más tiempo.

Técnica del temple
El nombre de esta técnica deriva del idioma italiano. Se trata de una técnica soluble al agua que se caracteriza por su composición. Para crear los colores los pigmentos se mezclan con agua destilada y yema de huevo. Aunque también se puede emplear cualquier otro tipo de grasa animal. Debido a su composición tan sencilla, es una de las técnicas de pintados más antiguas que existen.
Por ser tan fácil de fabricar ha sido utilizada por los egipcios, en el arte gótico, medieval y en diferentes lugares a lo largo de la geografía mundial hasta que, finalmente, fue superada por la técnica al óleo. Esto se debió a que el temple es una técnica de secado rápido y los artistas debían trabajar a mucha velocidad y con precisión, sin demasiado tiempo para retoques o correcciones. Una vez terminadas las pinturas se sellaban con barniz para que perduraran.